Irma (Sotelo) Acosta

Irma Sotelo Acosta fue una mujer excepcional como hija, madre, abuela, hermana, tía, familiar y amiga. Se marcho de este mundo tan de repente el día 29 de marzo, 2022 a la edad de 60 años, por voluntad de Dios nuestro Creador. Irma parte de este mundo y pasa hacer parte del reino del Creador, el cielo está de fiesta y ella fue la invitada de honor! La reciben familiares y amigos en compañía de Rafael Sotelo su padre y Lizbeth Garcia su sobrina.

Un viernes 26 de enero de 1962 en Namiquipa, Chihuahua Rafael Sotelo Solis y Dolores Acosta Ortiz le dieron la bienvenida a su hermosa niña Irma, siendo la tercera de ocho hijos.

Irma paso la mayoría de su vida en Cuidad Juárez, donde tuvo a sus dos hijos, Raymundo Garcia Sotelo, quien en compañía de su esposa Irasema Zanabria de Garcia le regalaron tres nietos, Dilan, Ximena y Sebastian Garcia. Su hija Lucero Gonzalez le regalo dos nietos, Delco y Carlos Gonzalez. Irma estaba muy feliz y orgullosa de su familia quien con un gran dolor le dan un último adiós.

En Juárez obtuvo su educación académica y trabajo en el IMSS por mas de 27 años, done conoció a la mayoría de sus amigas y amigos que con el tiempo se volvieron parte su familia. De allí fue de donde recibió su retiro. Irma amaba la vida, disfrutaba pasar tiempo con toda su familia y amigos. Le gustaba cocinar, bailar, salir de viaje y todo lo que involucraba sus nietos. Dios le concedió pasar los dos últimos años en Amarillo, Texas rodeada de sus familiares y sus padres.

Ella siempre dijo, “el día que yo falte, no me recuerden con tristeza, sepan que para mi fue un placer haber sido parte de sus vidas y saber que eh dejado una huella en sus corazones, le doy gracia a Dios y espero les haya dejado un ejemplo a seguir. Ruego a Dios los ilumine y ayude a mantenerse unidos en mi memoria.”

Sus hijos, nietos, su Madre Dolores Acosta de Sotelo, sus hermanos Alfonso Sotelo, Luz Elena Sotelo de Garcia, Rosa Maria de Gordillo, Martha Elvia Sotelo de Casillas, Jose Ramon Sotelo, Rafael Sotelo y Alberto Sotelo, junto a sus conyugues, sobrinos, no le dicen adios sino hasta luego.

Irma fue y seguirá siendo una persona muy querida, les pedimos eleven a Dios Nuestro Señor en sus oraciones por el eterno descanso de su alma.